Un Blog Sobre Reflexiones Y Refracciones...

Bajo la influencia de la Especia Melange, la Especia de las Especias...

miércoles, 2 de junio de 2010

La Sublimación De La Comedia

A un puñado de manzanas del Museo Guggenheim, al este de Central Park, en el barrio de East Side, hay una casa en la calle 93 Este que aún conserva su fachada de inicios del siglo XX. Es el portal 179 y allí, según el censo (chapucero, con grandes errores de nombres y en las edades de los niños) de Nueva York de 1905, vivía la familia Marks, era un apartamento de tres habitaciones. El padre de familia, Samuel Marks, era un sastre al que durante décadas sus hijos calificaron de espantoso. Groucho juraba que era obvio saber quién era cliente de su padre con sólo fijarse en las perneras desiguales de sus pantalones. Un bulo fácilmente desmontable, si se le daba tan mal, ¿por qué vivían en un barrio que ya en aquellos años tenía cierto nivel (aunque aún no fuera una zona de millonarios como en la actualidad) y no en peores zonas como los suburbios de Lower East Side? La condición de inmigrante de Samuel (había llegado de Alemania en 1883 a los 23 años con el nombre de Simon Marx) parecía abocarle a otras zonas. Simon/Samuel se casó en 1885 con Minnie Schoenberg, también inmigrante alemana (hija de un ventrílocuo y una instrumentista de arpa), y ya entonces vivían en Upper East Side de Manhattan. Sus hijos siempre llamaron a su padre con el sobrenombre de Frenchy, apodo surgido de su procedencia: la tradición familiar sitúa su lugar de nacimiento en la provincia francesa de Alsacia (Groucho incluso contretaba más: Estrasburgo), que fue anexionada por Alemania tras la guerra franco-prusiana de 1871. Lo que ha superado cualquier ataque filial, era la habilidad de Frenchy para la cocina. A la muerte de su padre en 1933, Groucho recordaba en forma de tributo: "¡Menudo cocinero era! Su Kugel (pastel de ciruelas) se convirtió en la comidilla de las oficinas de contratación de artistas; cuando un agente estaba medio convencido de las posibilidades de los Hermanos Marx, mamá le invitaba a cenar... Antes de que hubiera terminado de comer, ya nos habíamos asegurado varias semanas de trabajo." Otra de sus pasiones fue el pinacle, una ludopatía que le pasó a su hijo mayor, Leo (en el futuro sería conocido como Chico).
Los Marx (no está claro cómo el Marks se convierte en Marx) fueron una familia numerosa. En 1886 nació Manfred, un bebé que murió a los siete meses. Por eso el siguiente hijo, Leonard (o Leo), nacido en 1887, siempre fue el protegido. Después llegó en 1888 Adolph (o Arthur o Adhie). Julius Henry nació el 2 de octubre de 1890. Su madre le pinchaba llamándole der Eifersuchtige (el celoso), por la tirría que le tenía a Leo. En 1892 nació Milton, y en 1901, Herbert. Con ellos además vivía una chica, Pauline, posible hija bastarda de una hermana de Minnie. Por cierto, entre los numerosos hermanos de Minnie estaba Al Shean, un cómico de vodevil que pronto prosperó y se enriqueció. Minnie tomó nota rápida de ello y puso a sus hijos a prepararse para el show business. Groucho recuerda así, en su estilo tramposo y dickensiano, aquellos años: "¿Mi primer recuerdo? Yo colgado de la trasera de una camioneta en marcha. Gummo iba conmigo y debíamos de ser bastante pequeños, porque todavía no teníamos el piano. Y recuerdo haber jugado al stickball (juego callejero muy parecido al béisbol), lo que era todo un desafío, porque jugábamos sin pelota. No podíamos permitirnos comprar una. En fin, el caso es que donde vivíamos en Nueva York estábamos rodeados de fábricas de cerveza. Cuando iba al colegio de pequeño, siempre olía a malta. También recuerdo al hielero; gritabas por la ventana para decirle cuánto hielo querías. No teníamos nevera; éramos muy pobres. Mientras él hacía la entrega, nos metíamos en su carro y robábamos pedacitos de hielo. Desde entonces siempre se me ha dado muy bien eso de romper el hielo."

Julius (que posteriormente se bautizaría como Groucho) fue el más espabilado en los escenarios. En 1905 ya trabajaba en el Leroy's Touring Vaudevil Act, un espectáculo de vodevil de segunda con el que llegó a hacer una gira por Colorado. Los dos mayores, Leo y Adhie, muy parecidos físicamente, se ganaban la vida en todo tipo de trabajos: incluso, en diferentes épocas, tocando el piano en burdeles. En la primavera de 1907, Minnie tomó una decisión: los dos mayores ya estaban colocados, así que envió a Julius y a Milton (con el tiempo, Gummo) a una escuela de vodevil. Entraron en un grupo, Los Ruiseñores de Wayburn, que gracias a las intrigas de Minnie acabó siendo dirigido por la madre y denominado Los Cuatro Ruiseñores: Adhie (el último en entrar), Julius, Milton y un chaval llamado Lou Levy. Mezclaban canciones y frases cómicas. Leo, mientras, trabajaba en una editorial en Pittsburg, hasta que se cansó e intentó actuar por su cuenta. Al final, acabó uniéndose a la troupe de Minnie en el verano de 1912. Unos meses antes, en febrero, una crítica de Variety comenta su espectáculo y recalca que el chaval que se disfraza de Patsy toca el arpa "con un éxito sin precedentes, además de dar un toque de distinción al conjunto". Adhie se va a dedicar a ese instrumento, el de la abuela materna, y se llamará Harpo. El cuartel general de la familia está ahora en Chicago y desde allí crece su fama: en 1915 eran considerados uno de los mejores espectáculos de vodevil de Estados Unidos, y hasta su tío Al Shean escribía para ellos.

¿Por qué Harpo no habla? Groucho cuenta que en la semana antes de la Navidad de 1915, en una ciudad del medio Oeste, un empresario, Jack Wells, les estuvo tocando las narices hasta el punto que les pagó su salario de 112 dólares y medio en monedas de penique, metidas en cuatro grandes sacaas de tela. Lograron subirlas en el tren en el que se iban de la ciudad y después se asomaron a la plataforma trasera del último vagón. Mientras la ciudad se difuminaba en el horizonte, Harpo gritó: "¡Adiós, señor Wells; espero que su asqueroso teatro, arda entero!". Groucho remata: "A la mañana siguiente descubrimos que el teatro había ardido hasta quedar reducido a cenizas. A partir de entonces, decidimos no dejar hablar a Harpo, su charla era demasiado peligrosa." Probablemente, la verdad fuera que Adhie era un enamorado de la pantomima, del mimo. En 1918, Milton (Gummo) se incorporó al ejército para ir a la 1ª Guerra Mundial y en los espectáculos le sustituyo Herbert (Zeppo). Gummo se dedicaría posteriormente a los negocios textiles y a agente teatral.

Y ya lanzados, sólo quedan dos dudas: ¿actuaron alguna vez todos juntos?. Según el Flint Daily Journal, de la ciudad de Flint (Michigan), el 3 de septiembre de 1915 al escenario subieron los cinco Hermanos Marx, por la incorporación del adolescente Herbert. Este hecho sólo se repitió otra vez más: el 18 de febrero de 1957, en una tertulia de la cadena de televisión NBC titulada Esta noche, América después del anochecer.

¿Y de dónde surgieron sus nombres artísticos? Herbert fue Zeppo por su habilidad para las cabriolas, como las que hacía el entonces famosísimo chimpancé Zippo; Adhie, cambió a Harpo por el arpa. Leo se convirtió en Chico porque más que hablar inglés, lo destrozaba como si fuese un inmigrante italiano; Groucho, porque llevaba la bolsa de dinero familiar: grouch-bag; y Gummo, por las suelas de goma de sus zapatos de baile. Todos acabados en o, una moda cómica de la época. Sus nombres (excepto el del pequeño Zeppo, que llegaría después) los crearon en 1915, pero no los usaron fuera del ámbito familiar hasta la mitad de los años veinte.

Tras convertirse en los reyes del vodevil en 1920, la compañía quebró. Volvieron a salir adelante y crearon tres impresionantes espectáculos para Broadway: I'll Say She Is (1923), The Coconuts (1925), dónde ya les acompañó Margaret Dumont, y Animal Crackers (1926). Entonces ya colaboraban con su posterior guionista de cabecera, George S. Kaufman. Las dos últimas obras se convertirían en sus primeras películas: Los Cuatro Cocos (1929), que los hermanos rodaron en un estudio de Queens, hoy museo del cine, y El Conflicto de los Marx (1930). El resto es historia del cine.
A continuación os dejo una par de las mejores secuencias de Una Noche en la Ópera (1935), quizás la más conseguida y mejor realizada de todas las películas de los Marx y una de mis favoritas, que consigue hacerte sonreir y alegrarte la vida, y que suelo ver algún día en que me encuentro de bajón o un poco triste. En la primera, la célebre escena del contrato, Groucho, abogado y representante de una millonaria a la que pretende desplumar sin compasión, tras convencerla de que la mejor manera de presentarla en sociedad es financiando la Compañía de Ópera Nacional, trata de contratar al tenor protagonista por su cuenta, para así poder "pillar tajada", entonces se cruza con Chico, amigo de un corista al que tambien dice representar y que le intenta colar al sinvegúenza de su hermano, sin desvelar la identidad de este. "Me olvidé de decirle que no sé escribir" "Bah, es igual, la estilográfica no tiene tinta..." Genial.


Si no habeís oído nunca decir: "Esto esta más lleno, que el camarote de los Hermanos Marx". Ahora vaís a saber de dónde viene la frase. Groucho se dirige a su camarote, tras contratar a la Compañía de Ópera, y se dirige hacía América, pero se encuentra con unos polizontes..., para mí, el mejor gag de la historia del cine, atentos a los dialogos...

No hay comentarios:

Publicar un comentario